viernes, 16 de marzo de 2012

Nadie debería morir o sufrir porque el conocimiento que ya existe en algunas partes del mundo todavía no ha llegado a otras. Depende de cada uno de nosotros hacernos cargo de la responsabilidad de asegurar que el conocimiento fluya fácilmente hacia donde se lo necesita.

 Fundamentalmente, el conocimiento no debería ser visto como algo que es provisto de una persona a la otra, o desde los países ricos a los pobres, sino como algo que fluye hacia delante y hacia atrás, y es mejorado, adaptado y actualizado continuamente. Al aceptar que todos tenemos algo que aprender, y algo que compartir, el conocimiento puede empezar a fluir más efectivamente alrededor y a través de las organizaciones y las comunidades, para el beneficio de los países desarrollados y en desarrollo, de la misma forma.  


Herramientas para el aprendizaje

1. Realiza mapas esquemáticos con las palabras claves de la información que debes aprenderte. Es sencillo, no toma mucho tiempo y ayuda para desarrollar la interpretación.

2. Graba las clases, si eres de los que les cuesta escribir y prestar atención en clases a la vez. Así tendrás una réplica exacta de lo que dijo el profesor.

3. Si eres de los que puede escribir y prestar atención a la vez, anota los apuntes en el cuaderno con las palabras claves para luego buscar más información de ser necesario.

4. Al momento estudiar debes apagar la música y el televisor para una mejor concentración.

5. Repasa en la noche y en la mañana para que mantengas fresca la información en tu memoria.